SilverStone ha lanzado al mercado la tarjeta de expansión ECM40, una solución SSD PCIe 4.0 x16 diseñada para soportar hasta cuatro unidades NVMe M.2. El ECM40 se caracteriza por un elegante exterior de aluminio negro con dimensiones de 147,74 mm de ancho, 21,59 mm de alto y 181 mm de profundo. Esta tarjeta de un solo grosor de ranura pesa 501 gramos.
El ECM40 está equipado con el chip controlador TPS56221DQPT, ofreciendo cuatro ranuras M.2 para SSDs de 22 x 30 mm, 22 x 42 mm, 22 x 60 mm y 22 x 80 mm. Cabe señalar que no admite configuraciones RAID de hardware.
Para garantizar un rendimiento óptimo y duradero de las unidades SSD, el ECM40 incorpora un diseño de refrigeración activa. Este incluye un ventilador de doble rodamiento de bolas de 40 mm de ancho, 10 mm de alto y 40 mm de profundo, capaz de alcanzar hasta 7,000 RPM ± 10%. Este diseño mejora significativamente la eficiencia de enfriamiento. Además, un interruptor situado en el deflector permite gestionar de manera flexible el funcionamiento del ventilador según las necesidades del usuario.
Para mejorar aún más la disipación térmica, el ECM40 viene equipado con almohadillas térmicas de 1 mm de espesor y un coeficiente de conductividad térmica de 3 W/m.k. Estas almohadillas están diseñadas para conducir eficazmente el calor lejos de los SSDs, asegurando así la estabilidad del sistema. Además, la tarjeta cuenta con indicadores LED para mantener informado al usuario sobre su estado de funcionamiento.
Para maximizar el potencial del ECM40, es esencial que la placa madre del usuario soporte la funcionalidad de división PCIe. Cambiando las ranuras PCIe x16/x8 al modo 4x4/4x2, se pueden integrar múltiples SSDs al sistema. Para lograr un rendimiento óptimo con tres o cuatro SSDs, se requiere un ancho de banda PCIe completo de 16 carriles y una CPU que proporcione suficiente soporte de ancho de banda PCIe.