Los procesadores AMD de la serie Ryzen 9000, además de actualizar el proceso y la arquitectura de la CPU, también incorporan un controlador de memoria mejorado. Aunque la mejora no es drástica, sí incrementa las frecuencias de memoria, especialmente cuando se combina con las nuevas placas base X870E y X870. La capacidad de overclocking automático de la memoria EXPO también ha aumentado notablemente.

La serie Ryzen 9000 admite de forma nativa la frecuencia de memoria DDR5-6000 y puede alcanzar hasta DDR5-6400 con una frecuencia de cruce de 1:1.

Para los usuarios habituales y jugadores, la frecuencia de memoria óptima sigue siendo DDR5-5600, similar a la de la serie Ryzen 7000.

Si se requieren frecuencias de memoria y ancho de banda superiores, los usuarios pueden optar por la relación de división 1:2. Esto permite alcanzar frecuencias de hasta 8000 MHz con las cuatro tarjetas de memoria instaladas y más de 9000 MHz con solo dos tarjetas.

Como ya se ha mencionado, alcanzar frecuencias excepcionalmente altas es todo un reto para los controladores de memoria de los procesadores de sobremesa, como los de la serie Ryzen 7000/9000, debido a su calidad relativamente media y al diseño multichip de los chips.

En cambio, la serie Ryzen 8000G, derivada de procesadores móviles de un solo chip, cuenta con un controlador de memoria superior y puede alcanzar frecuencias más altas. Todas las frecuencias de memoria DDR5 de las plataformas AMD se alcanzan con la serie Ryzen 8000G.